Una nueva caravana de migrantes centroamericanos ingresó a México por la frontera sur.
Se trata de un grupo de 500 indocumentados que cruzaron a pie el Puente Internacional Rodolfo Robles, que comunica a México con Guatemala.
Tras arribar a territorio nacional, emprendieron su camino hacia Tapachula, Chiapas.
Una vez más, las autoridades migratorias se vieron rebasadas y no pudieron frenar el paso del contingente que partió desde Honduras.